EL DESARROLLO DE LA PACIENCIAAbril 29 2018
Charles Stanley.!
Santiago 1.1-4
*Santiago, *siervo de Dios y del Señor *Jesucristo, a las doce tribus que se hallan dispersas por el mundo: Saludos. Pruebas y tentaciones 2 Hermanos míos, considérense muy dichosos cuando tengan que enfrentarse con diversas *pruebas, 3 pues ya saben que la prueba de su fe produce constancia. 4 Y la constancia debe llevar a feliz término la obra, para que sean *perfectos e íntegros, sin que les falte nada.
James 1:1-4 | NVI
Cuando las personas me dicen que están orando por paciencia, muchas veces les pregunto qué más están haciendo para tener un corazón tranquilo y apacible. La paciencia no es algo que los creyentes reciban, es un atributo que desarrollan con el tiempo y la experiencia.
Pensemos en la paciencia como un músculo que tenemos que utilizar para verlo desarrollado. Para ello, los creyentes debemos reconocer la dificultad como una oportunidad para fortalecer la paciencia. El instinto humano es clamar a Dios cuando la tribulación toca nuestra puerta. Le echamos la culpa a otros. Nos resistimos. Nos quejamos, pero no decimos: “¡Gracias, Señor. Es hora de aprender a ser más paciente!”. Las personas no estamos acostumbradas a pensar de esa manera, pero según la Biblia, así es cómo debemos hacerlo
El libro de Santiago nos dice que consideremos las pruebas como un motivo de gozo (Santiago 1.2). Desde el punto de vista humano, alabar al Señor por las tribulaciones es anormal. Sin embargo, hacerlo comienza a tener sentido para los creyentes cuando nos aferramos a la promesa de Dios de que todas las cosas son para nuestro bien (Romanos 8.28). 28 Ahora bien, sabemos que Dios dispone todas las cosas para el bien de quienes lo aman, los que han sido llamados de acuerdo con su propósito.
Romans 8:28 | NVI
No estamos esperando en el Señor en vano. Podemos alabarle por la solución que dará, por las vidas que cambiará, o por el fruto espiritual que desarrollará en nuestra vida.
Aceptar las adversidades como un medio de crecimiento es un concepto radical en este mundo; y más aún lo es el creyente que alaba al Señor por la tormenta. Pero los seguidores del Señor tenemos motivos para regocijarnos. La tribulación aumenta nuestra paciencia, para que podamos mantenernos firmes en las promesas de Dios y esperar su momento perfecto.
EL FRUTO ESPIRITUAL DE LA PACIENCIA
abril 30, 2018
Romanos 5.1-4
En consecuencia, ya que hemos sido *justificados mediante la fe, tenemos paz con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo. 2 También por medio de él, y mediante la fe, tenemos acceso a esta gracia en la cual nos mantenemos firmes. Así que nos *regocijamos en la esperanza de alcanzar la gloria de Dios. 3 Y no sólo en esto, sino también en nuestros sufrimientos, porque sabemos que el sufrimiento produce perseverancia; 4 la perseverancia, entereza de carácter; la entereza de carácter, esperanza.
Romans 5:1-4 | NVI
La lista conocida como “el fruto del Espíritu” incluye la “paciencia” (Gálatas 5.22, 23), En cambio, el fruto del Espíritu es amor, alegría, paz, paciencia, amabilidad, bondad, *fidelidad, 23 humildad y dominio propio.
Galatians 5:22-23 NVI
pero eso no significa que el Espíritu Santo la imponga en la vida del creyente. Por el contrario, Él actúa como nuestro maestro confiable, y el que hace posible que crezcamos. El fruto espiritual es algo que madura con el tiempo a medida que obedecemos al Padre celestial y nos rendimos a su voluntad.
La paciencia para con Dios y para con nuestro prójimo es consecuencia de una fe firme. El Espíritu Santo nos impulsa a prestar atención a la obra del Señor a lo largo de nuestra vida. Nuestra confianza en Él se nutre por la oración contestada, por las ricas bendiciones que surgen de las circunstancias difíciles, y por cada migaja de bien que Dios saca de una situación negativa. A medida que crece nuestra confianza en su bondad y en su soberanía, nos hallamos más dispuestos a esperar las soluciones y las respuestas de Dios.
De hecho, creo que reconocer la soberanía de Dios es clave para desarrollar paciencia. Una parte importante de rendirse a su control absoluto es esperar que Él haga su voluntad. Es sabio comprender que nuestra vida se desarrolla de acuerdo con su plan maestro; la impaciencia no hace que Él se mueva más rápido. Dios espera que sus hijos sigamos su plan y seamos pacientes, sin importar el ritmo que Él fije.
La paciencia no es algo natural. Es por eso que tenemos al Espíritu Santo. Él fortalece nuestra determinación a ser pacientes sin quejarnos cuando el avance parezca lento. Después de todo, Dios es lento solo desde el punto de vista humano; desde la perspectiva divina, Él trabaja siempre a la velocidad perfecta.
Amigos cristianos en todas las naciones; tener paciencia, esperar en Jesucristo, darnos el tiempo sin afanarnos, para que que sucedan de acuerdo a Su Voluntad.
Difícil sí que es; por qué no estamos acostumbrados a esperar; queremos que todo sea para ya; sea cual fuere nuestra necesidad; lo queremos ya.
Pero que nos dice La Palabra de Dios; esperar en El dando gracias por la espera, la prueba; alabándole por qué mientras esperamos más rápido vendrán los buenos resultados; veremos más claro y sacaremos provecho de la lección.
¿Él cristianismo es de locos; quién va a creer que debemos dar gracias y alabar a Dios; cuando estamos pasando por momentos difíciles; teniendo paciencia y gozo a la vez?
Pero así de claro lo es: Ro 12/12.
12 Alégrense en la esperanza, muestren paciencia en el sufrimiento, perseveren en la oración.
Romans 12:12 | NVI
Col 1/10/12a.
para que vivan de manera digna del Señor, agradándole en todo. Esto implica dar fruto en toda buena obra, crecer en el conocimiento de Dios 11 y ser fortalecidos en todo sentido con su glorioso poder. Así perseverarán con paciencia en toda situación, 12 dando gracias con alegría al Padre.
Colossians 1:10-12a | NVI
2 P 3/8/9.
8 Pero no olviden, queridos hermanos, que para el Señor un día es como mil años, y mil años como un día. 9 El Señor no tarda en cumplir su promesa, según entienden algunos la tardanza. Más bien, él tiene paciencia con ustedes, porque no quiere que nadie perezca sino que todos se *arrepientan.
2 Peter 3:8-9 | NVI
Así que Hermanos a practicar la paciencia y esperar con alegría de su fruto al momento que nos corresponda.!
Bendiciones a granel en sus vidas.!
Amen.!
Jcoa.!