¡La Obra Magna de Dios! Max Lucado.!
¿Por qué Mi Sr Jesucristo y sus ángeles se regocijan por un pecador que se arrepiente? ¿ pueden ver algo que nosotros no vemos? ¿Saben algo que nosotros no sabemos? Claro que si. Saben lo que guarda el cielo. Han visto la mesa, han oído la música, y se mueren de deseos de ver nuestros rostros cuando lleguemos.
Cuando lleguemos y entremos en la fiesta celestial ocurrirá algo maravilloso, una transformación final. Seremos como Mi Sr Jesucristo. 1J 3/2. 2 Queridos hermanos, ahora somos hijos de Dios, pero todavía no se ha manifestado lo que habremos de ser. Sabemos, sin embargo, que cuando Cristo venga seremos semejantes a él, porque lo veremos tal como él es.
1 John 3:2 | NVI
De todas las bendiciones del cielo una de las más grandes será nuestra. Seremos la obra magna de Nuestro Padre Celestial, seremos su obra de arte. La obra de Nuestro Padre Celestial quedara completa.
Finalmente tendremos un corazón como el suyo.
Amaremos con amor perfecto.
Adoraremos con un rostro radiante.
Oiremos cada Palabra que Nuestro Padre Celestial nos Hable.
Nuestros corazones serán puros, nuestras palabras serán como joyas, nuestros pensamientos serán como tesoros.
Seremos tal como Jesus. Al fin tendremos un corazón como el de El. Sin culpa, sin temores. Entusiasta y gozoso. Adorándole incansablemente. Discerniendo sin equivocarnos.
El cielo está poblado por aquellos que le permitieron a Nuestro Padre Celestial ser cambiados transformados a su semejanza.
Amigos cristianos en todas las naciones, tener un corazón y ser como Mi Sr Jesucristo es la bendición más importante en nuestras vidas. Poder llegar a Su Casa Celestial y participar de Su Gloria, compartir la Cena. Adorarle. Alabarle. Honrarle. Glorificarle toda la eternidad, que maravillosos tiempos vamos a tener y compartir juntos.
Por eso nuestra fe debe ser tan fuerte y segura; por qué debemos mirar que nuestros actos sean de bendición aquí en las naciones donde vivimos, para contarles a todas las personas que pasan por nuestras vidas, la meta que tenemos, y de la que ellos también pueden participar llegar a la Casa de Dios, para vivir eternamente en El.
Amen.!
Jcoa.!