¡Dar y Bendecir! Jcoa.!

¡Nuestro tesoro!Charles Stanley.!

Mateo 6.19-21

19 »No acumulen para sí tesoros en la tierra, donde la polilla y el óxido destruyen, y donde los ladrones se meten a robar. 20 Más bien, acumulen para sí tesoros en el cielo, donde ni la polilla ni el óxido carcomen, ni los ladrones se meten a robar. 21 Porque donde esté tu tesoro, allí estará también tu corazón.

Matthew 6:19/21 | NVI
Nuestra manera de ver el tesoro que tenemos es una revelación personal de quiénes somos. La pregunta es: ¿Dónde está nuestro corazón?

No importa cómo hayamos adquirido las cosas que tenemos, ya sea trabajando, invirtiendo o ahorrando, la realidad es que el Señor es el dueño de todo, y nosotros somos simplemente administradores. Si tenemos una actitud de “mi tesoro es mío”, podemos descubrir, en realidad, que lo que tenemos es mucho menos satisfactorio de lo que esperábamos.

He aquí una mejor perspectiva en cuanto a las posesiones y la abundancia económica: veamos estas cosas como un medio para responder ante las necesidades de otros, y una manera de servir a Dios e impulsar su reino (Ef 4.28; Mal 3.10). 28 El que robaba, que no robe más, sino que trabaje honradamente con las manos para tener qué compartir con los necesitados.

Ephesians 4:28 | NVI

10 »Traigan íntegro el diezmo para los fondos del templo, y así habrá alimento en mi casa. Pruébenme en esto —dice el Señor Todopoderoso—, y vean si no abro las compuertas del cielo y derramo sobre ustedes bendición hasta que sobreabunde. 

Malachi 3:10 | NVI

Cuando damos a los necesitados o para el trabajo del reino, estamos transfiriendo de inmediato nuestro tesoro de la Tierra al cielo.

Las bendiciones tangibles del Señor también pueden usarse apropiadamente para ayudarnos a alcanzar los objetivos dados por Dios, que han sido establecidos por medio de la oración. Por ejemplo, si el Señor le ha bendecido económicamente, y le ha mostrado que Él desea que usted use su talento musical para servirle, entonces puede ser conveniente que compre un instrumento musical. Cuando andamos en la voluntad de Dios y llevamos nuestras peticiones a Él, aun los anhelos de nuestro corazón se convierten en buenas maneras de usar nuestro tesoro, porque nuestras preferencias estarán alineadas con los deseos de Dios para nosotros.

Piense siempre en el valor eterno de sus objetivos. Lo esencial es que debe confiar a Dios hasta la última gota de su tiempo, talento y tesoro.

Amigos cristianos en todas las naciones, qué maravillosa Palabra, saber que todo lo que tenemos le pertenece a Nuestro padre Celestial, lo hemos recibido como una herencia de parte suya, para que lo administremos sabiamente, compartiéndolo en las diferentes situaciones de nuestras vidas, apoyando su obra, en nuestra iglesia, bendiciendo a la persona que necesita un consejo, una ayuda económica, espiritual, material, ofrendando de corazón con alegría sabiendo que lo estamos haciendo por qué nace es un instinto nuestro y lo damos todo.

Diezmar y ofrendar es la mejor manera de cumplir con lo que es de Nuestro Padre Celestial; sabemos que cumplimos y la satisfacción que nos queda es del deber cumplido, alegría, esperanza, de ser obedientes a Sus Mandatos.

Las bendiciones de Nuestro Padre Celestial siempre están en el momento oportuno, el día que es a la hora confirmada. 

Esperemos sus bendiciones dando lo mejor de nuestras vidas, así en el momento menos esperado todo lo que necesitamos estar en tu puerta.! 

Gracias Padre Celestial por Tus Bendiciones.!

Gracias Mi Sr Jesucristo tus Bendiciones son reales.!

Gracias Espíritu Santo de Dios Tu Poder está en nuestras vidas por siempre.!

Amen.!

Anuncio publicitario

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s